Todo el mundo conoce el Victoria & Albert Museum, pero poca gente sabe que el afamado edificio de South Kensington tiene un hermano pequeño que vive en el este de la ciudad, en Bethnal Green.
Alejado de los circuitos turísticos, el Museum of Childhood es un lugar apto para todos los públicos que merece la pena visitar.
Atravesar sus puertas es emprender un viaje al País de Nunca Jamás del que cuesta regresar. Muñecas, ositos de peluche, mecanos, marionetas, caballitos, bicicletas, coches, juegos de mesa… pueblan el interior de un mágico edificio que nos hace reencontrarnos con el niño que llevamos dentro. Pero además de juguetes de todo tipo, el museo cuenta con una importante colección de casas de muñecas. Sin duda, un auténtico lujo para los amantes de las miniaturas.
Uno de los tesoros que se puede contemplar es la Casa de Nuremberg, de 1673, la más antigua de las que se exhiben en sus vitrinas. Pero la joya de la Corona es la de la Reina Mary -mujer de Jorge V- , que fue amueblada personalmente por ella y cedida al museo en 1921. La casa tiene algunas curiosidades como, por ejemplo, portarretratos con fotos a escala del Rey Jorge V, el Príncipe de Gales y la Princesa Victoria María.
Pero además, se puede disfrutar de exposiciones temporales, como la que se exhibe actualmente de fotografías de muñecas; o de auténticas obras de arte como El cubo de la infancia, de la pintora Sarah Raphael, conocida por sus retratos e ilustraciones de libros. Se trata de una especie de Cubo de Rubik gigante, de paredes transparentes, en cuyo interior habitan multitud de coloridos personajes, animales y objetos de lo más variado.
A medida que se avanza en la visita, un montón de recuerdos dormidos afloran en nuestra memoria haciéndonos esbozar una sonrisa. Y, por un momento, volvemos a creer en la magia, sin importarnos si lo que se presenta ante nuestros ojos es ficción o realidad, como ocurre con los juguetes ópticos que, jugando con la ilusión, nos hacen creer que las imágenes fijas que vemos se mueven de verdad.
En suma,se trata de un museo que invita a soñar, a jugar, a experimentar y a divertirse. ¿Preparado para volver a la infancia?
